En el país de México, el sector logístico es uno de los principales emisores de gases de efecto invernadero, los medios de transporte terrestre, como camiones y furgonetas, generan gran parte de estas emisiones.
Se ha desarrollado un auge en tecnologías de transporte limpias en los últimos años, como los autos de hidrógeno verde utilizando hidrógeno como combustible, que se produce desde fuentes renovables como la energía solar o eólica.
La adopción progresiva de vehículos de hidrógeno verde en México presenta desafíos y oportunidades para el sector logístico. Algunas de las implicaciones más relevantes incluyen:
- Infraestructura de abastecimiento: La necesidad de establecer estaciones de carga de hidrógeno exige una reconfiguración de la infraestructura logística. Esto implica nuevas inversiones, pero también abre puertas a alianzas estratégicas entre proveedores de hidrógeno y empresas de logística.
- Distribución y comercio electrónico: Con la autonomía y rapidez de carga de los autos de hidrógeno, las empresas de distribución y comercio electrónico pueden beneficiarse de flotas más eficientes y sostenibles, lo que a su vez puede mejorar la experiencia del cliente.
- Capacitación y especialización: El auge del hidrógeno verde demanda profesionales capacitados en la gestión, mantenimiento y distribución de esta nueva tecnología, esto significa una oportunidad para centros de formación y universidades de ofrecer programas especializados.
La elaboración de los vehículos de hidrógeno verde aún se encuentra en sus primeras etapas, los retos principales que enfrenta son:
- El coste de los vehículos: Los autos de hidrógeno verde son más costosos que los vehículos tradicionales.
- La falta de infraestructura de recarga: Actualmente, existen muy pocas estaciones de recarga de hidrógeno en México.
El crecimiento de los autos de hidrógeno verde en México no es solo una tendencia ambiental, sino también una revolución logística.
Fuente: The Logistics World